Zarzuela del maestro Chapí dedicada a Torregamones: La Raposa

CUADRO PRIMERO

ESCENA X

DICHO y DON QUINTILIANO – Aquél va á salir y tropieza en la puerta con Don Quintiliano, que viene corriendo.

QUINTILIANO:
¡Tío Saturio!
SATURIO:
¿Qué es eso? ¿Qué ocurre?
QUINTILANO:
(Fatigoso.) Pues… que… Yo…
SATURIO:
Pero hable usted. ¿Qué pasa?
QUINTILIANO:
Periculum magnum.
SATURIO:
¡Hombre de Dios, déjese de latinerías!
QUINTILIANO:
Pues que Blas, el estanquero, ha ido á Zamora á la saca.
SATURIO:
¿Y qué?
QUINTILIANO:
Que acaba de llegar en este momento.
SATURIO:
¡To! ¿Y qué?
QUINTILIANO:
Que acaba de decirme que el candidato ministerial anda recorriendo el distrit de ocultis.
SATURIO:
¡Demóngano! ¿Y qué hacemos?
QUINTILIANO:
Yo creo que lo más urgente es avisárselo á don Alberto para que esté en autos y redoble sus esfuerzos.
SATURIO:
(Sentándose á la mesa.) Pues manos á la obra. Usted dirá… pero clarito y sin latínibus de esos. Vamos á ver. Venga.
QUINTILIANO:
Dominus meus et amicus.
SATURIO:
(Dando un puñetazo en la mesa.) Vaya, ora pro nobis. ¡Pero, hombre de Dios!
QUINTILIANO:
«Muy señor mío y amigo.»
SATURIO:
(Escribiendo.) Igo…
QUINTILIANO:
Punto y coma. «Blas el estanquero acaba de llegar de Zamora»
SATURIO:
Mora…
QUINTILIANO:
«Y según parece», coma, «el candidato ministerial recorre el distrito, y aquí se le espera.»
SATURIO:
Pera…
QUINTILIANO:
Punto. «Pudiera suceder que esto envalentonara á los contrarios, aunque estamos dispuestos á meterlos en caja.» Caja es con jota…
SATURIO:
¿Y qué más dá?
QUINTILIANO:
¡Pues no ha de dar!
SATURIO:
Vaya.
QUINTILIANO:
«Y á conseguir que el entusiasmo de los nuestros suba.»
SATURIO:
Uva… (Todas estas palabras muy marcadas.)
QUINTILIANO:
«Y no estaría de más añadir algo al vino y al queso,» coma.
SATURIO:
Coma.
QUINTILIANO:
«Para que el cuerpo electoral coma.»
SATURIO:
Coma.
QUINTILIANO:
Punto.
SATURIO:
¿En qué quedamos, punto ó coma?
QUINTILIANO:
Coma, en letras, y un punto después. «Blas, aunque estanquero, es de los nuestros, y esto del candidato»…
SATURIO:
Sí, coma.
QUINTILIANO:
Lo dijo Blas.
SATURIO:
Punto redondo.
QUINTILIANO:
Punto, y aparte. «Usted decidirá. Suyo…»
SATURIO:
Sí, etcétera… Ya está.
QUINTILIANO:
«Post scriptum.»
SATURIO:
¿Qué?
QUINTILIANO:
«Post criptum.» Ponga usted.
SATURIO:
¡No me da la gana poner eso! ¡Ustaquio!

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